Posiblemente estarás esperando propuestas plasmadas en frases desafortunadamente estandarizadas por muchas otras ofertas relacionadas con el Tarot.

Frases como “sal de tus problemas económicos en tres días”, “recupera a tu pareja en ocho días”, “consigue trabajo en diez días”, “nuestros poderosos Arcanos te conducirán por los caminos de la prosperidad”,  etc.  se podrán encontrar.

Y, así sucesivamente, “bombardean” al usuario con toda una serie de promesas difíciles de cumplir, aunque no imposible por supuesto, dado el enorme poder del Tarot.

Con todo el respeto que se merecen la mayoría de mis colegas, no falta uno que otro que se anuncia estrepitosamente, sin tener la más mínima idea de lo que es el Tarot.

Yo,  no entro en esos escenarios del cliché y la monotonía. En mi caso, voy al fondo, a la sustancia y a la esencia de esa maravillosa disciplina,  llamada Tarot.

La filosofía del tarot es tan sumamente rica que responde a todas las preguntas,  junto a todos los conocimientos y experiencias que he ido adquiriendo con los años, me basta para ayudar con eficacia a todos mis clientes, en cualquier plano en el que requiera ayuda.

Generalidades sobre el tarot

Continuando con el estilo planteado en el acápite anterior, no me dedicaré a explicar  “una y mil veces” qué y cuáles son los Arcanos Mayores,  el significado de la presencia invertida de la carta de El Loco en la tirada, ni nada que se parezca

El Tarot ha sido considerado, por larga tradición y desde principios del siglo XV en la Europa Medieval,  como uno de los Oráculos más certeros y acertados.

Tanto es así, que muchísimos clérigos de la época recurrían a los expertos del Tarot,  para develar muchos asuntos relacionados con sus vidas.

Yo sólo acudo a la eterna e inefable sabiduría de los Seres Luminosos que siempre  me orientan para,  de paso, orientarte a ti.

Ahora, es necesario tener presente que las cartas de Tarot, como elementos físicos que son (que están compuestos por unos cartones y ciertos ideogramas) no representan nada en sí mismos, esto es, mirándolos aparte que quienes los usan.

Por ello, una que otra sonrisa se me escapa cuando escucho a las personas decir: “yo estas cartas no las tengo en mi casa, porque me da miedo”.

Esos  “trozos de cartón pintados con figuras”,  adquieren su verdadera dimensión en la medida en que sean debidamente utilizados por el experto cartomante y el consultante.

En la sesión esotérica, las cartas del Tarot “despiertan” para convertirse en maravillosas mediadoras entre las fuerzas superiores y la realidad del posiblemente angustiado consultante.

Claro está que el aporte del experto tarotista es fundamental. Sin él, las cartas continuarán en estado de aletargamiento, permítanme la expresión.

La intuición del cartomante es imprescindible para lograr una lectura e interpretación certera de la tirada o, lo que es lo mismo,  de lo que nos han querido manifestar los Seres de Luz.

La videncia en   tarot luz divina

Una de las características más maravillosas que acompañan a la práctica del tarot, se constituye por el hecho de que, mediante el estudio y la experiencia, es posible adquirir el don de la videncia.

En mi calidad de experta en el Tarot, tengo la maravillosa facultad de “ver con la mente” (durante o después de la tirada) situaciones, hechos concretos, personas, etc.

No dudes, entonces, en acudir a mí. Sin plantearte promesas ilusorias, estoy en capacidad de asegurarte que tengo un permanente acceso a esa enorme fuente de sabiduría, llamada Tarot.

Podré ir, de ser necesario, a tu futuro (o a los asuntos presentes y pasados que aún desconoces) para advertirte de algunos aspectos que, de no cambiar desde ya, te podrán perjudicar.

Con los RESULTADOS que vas a poder apreciar, sin necesidad de que te desesperes innecesariamente, te podrás ir percatando de cómo Tarot Luz Divina,  empieza a cambiar tu vida.

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