La vibración cromática de las piedras preciosas ejerce su efecto directamente sobre nosotros tanto a un nivel visual como energético a través de nuestra piel. Pero la vibración que ejercen sobre nuestro organismo a nivel visual tiene una especial importancia, ya que nuestros ojos, muy especialmente la retina, son una prolongación de nuestro cerebro y es muy sensible a la luz y a la manifestación del color. Por tanto, cuando esta vibración penetra a través de nuestros ojos tiene un acceso directo al cerebro, afectando a éste desde un primer momento y al resto de nuestro organismo por sintonía.
Todas y cada una de las moléculas que componen nuestro organismo, por medio de su vibración generan un campo energético a su alrededor, la unión de todos estos campos da lugar a un cuerpo energético de aspecto similar al físico y que según cuentan diversas tradiciones sobrevive tras la muerte del cuerpo físico. Este cuerpo sutil posee 7 centros energéticos principales llamados chakras, los chakras tienen una relación directa con las glándulas endocrinas en un nivel físico
El cuerpo sutil se nutre de los colores, de las imágenes, de los sonidos bellos, los olores y de los sabores agradables, así como de los pensamientos positivos y las energías naturales como las que provienen del sol, el agua, los campos, etc. Todo pensamiento negativo, imágenes o sonidos estridentes, dañan el cuerpo sutil.
Es en cuerpo sutil donde se hacen patentes las enfermedades, antes que afectar al organismo.
Los cristales y las gemas gracias a la energía que emiten debido a la vibración de sus partículas y al reflejo de la luz en forma de color, afectan de manera muy positiva a la vibración de nuestro cuerpo sutil, el motivo es porque armonizan y equilibran sanando, llegando a curar nuestro cuerpo físico a través de las glándulas endocrinas.
La antigua ciencia de los cristales recomienda una piedra determinada para cada persona según el mes de nacimiento. De acuerdo a este antiguo conocimiento la relación mes-piedra es la que ahora os voy a exponer:
Mes de enero: La turquesa, el zirconio y el ámbar.
Mes de febrero: La amatista.
Mes de marzo: El Jade y el Jaspe.
Mes de abril: Lapislázuli y el zafiro.
Mes de mayo: Agata y calcedonia.
Mes de junio: Esmeralda y feldespato verde.
Mes de julio: Malaquita y ónix.
Mes de agosto: Rubí, granate y cornalina.
Mes de septiembre: Serpentina verde claro y peridoto.
Mes de octubre: Cristal, diamante y berilo.
Mes de noviembre: Topacio.
Mes de diciembre: Crisólito.
Bueno espero que este artículo haya sido de vuestro agrado y os haya sido muy útil para sacaros de algunas dudas.